La migración es un fenómeno que está presente desde épocas muy remotas, y que desde finales del siglo XX ha ido obteniendo mayor relevancia internacionalmente. En el marco del siglo XXI, este fenómeno ha causado impactos tanto negativos como positivos, dentro de los cuales las remesas es uno de los principales rubros de las transferencias corrientes en la balanza de pagos de muchos países que han sido afectados por la crisis o que están en desarrollo. En ese sentido, es preciso determinar qué es una remesa y cuáles son sus características. 

Según el Manual de Balanza de Pagos del Fondo Monetario Internacional (FMI), se consideran remesas a tres conceptos contables diferentes: 1) remesas de los trabajadores, como la transferencia de los extranjeros residentes en el exterior que han permanecido o intentan permanecer por un periodo mayor a un año; 2) los fondos ganados por inmigrantes no residentes, los que envían dinero pero han residido menos de un año en su país de destino; y 3) las transferencias de emigrantes, que hace referencia a los bienes que el emigrante lleva de un país a otro cuando se traslada. No obstante de lo anterior, considero que una definición general de las remesas es aquella que hace referencia a estas como envíos de dinero que envían los emigrantes a sus países de origen, que normalmente proceden de sus sueldos y salarios por sus trabajos en el país donde residen.

En relación a las características de las remesas, como he mencionado anteriormente, son envíos que hacen los emigrantes para solucionar la situación económica de sus familiares en su país de origen. En otras palabras, estos envíos se originan como consecuencia de obligaciones y lazos familiares entre los inmigrantes y las personas que han dejado en su país de origen. Por otro lado, se ha podido apreciar que en la ultima década son cada vez más las mujeres las que emigran para solventar la canasta familiar. Asimismo, otra característica relevante de las remesas, es la periodicidad de estas, las cuales varían según las posibilidades del emigrante en el país donde labora, siendo el mes de diciembre uno de los más concurridos para el envío de remesas. 

Ahora bien, en relación a la evolución de las remesas en el siglo XXI, podemos observar que desde la Revolución Industrial (siglo XVIII), las personas comenzaron a desplazarse y a trabajar en países ajenos al país de origen. Sin embargo, no es hasta finales del siglo XX que gracias al desarrollo de las tecnologías y a la globalización, permitieron que las migraciones se vuelven masivas y se vean facilitadas por las elevadísimas diferencia de rentas y por que el costo de transporte se volvió mas bajo y mas accesible.

Como podemos apreciar, el gráfico anterior, obtenido del Grupo del Banco Mundial, nos muestra las remesas que envían los inmigrantes de EE.UU. a sus países de orígenes. En ese sentido, tomando como sujeto de prueba a EE.UU. en nuestro análisis, podemos observar que las remesas han ido aumentando, sobre todo en los países de América Latina y el Caribe, siendo estos los que han duplicado el monto de las remesas que enviaban. Por otro lado, podemos apreciar que las remesas hacia Europa, el Oriente medio y África del norte han aumentado, pero no lo suficiente en comparación con América Latina y el Caribe. Por ultimo, podemos observar en el grafico que África Subsahariana se ha mantenido estable en relación a las remesas que se envían dentro de su territorio.

En referencia de la evolución de las remesas, como todos sabemos, desde el 2009, la crisis internacional ha afectado a diversos países, lo que también ha repercutido en las remesas. En ese sentido, podemos apreciar que el monto enviado a los familiares se ha reducido considerablemente. Asimismo, se ha podido observar que ha aumentado el numero de emigrantes en los países más afectados por la crisis. En ese sentido , se ha podido apreciar que ha aumentado el numero de remesas que se envían a la Union Europea.

A modo de conclusión, considero que las remesas han ido aumentando a nivel macroeconómico. Asimismo, son una parte importante de la economía interna de un país. En ese sentido, cada país debería adecuar políticas que permitan dar incentivos y brinden facilidades para el envío de remesas.